Una buena hidratación desempeña un papel crucial en el rendimiento, la prevención de lesiones y la recuperación para todas las personas realizando ejercicios físicos. Durante tus entrenamientos de ejercicios hidratarse adecuadamente es uno de los mejores indicadores de salud.
¿Cuánto beber y cuándo?
La cantidad de líquido necesaria varía según la intensidad y la duración del ejercicio, pero es crucial mantenerse hidratado antes, durante y después de la actividad física.
Las bebidas deportivas están diseñadas para promover la hidratación, mantener una buena resistencia y reponer electrolitos. Pueden ser beneficiosas especialmente durante y después del ejercicio prolongado para ayudar a mejorar la atención y sirven como potenciadores del rendimiento. Consulta personalmente con un médico o entrenador físico antes de tomar cualquier bebida.
La recomendación mínima de la cantidad de agua que hay que beber al día son 2 litros de agua. Si haces ejercicio es fundamental cubrir con este requerimiento mínimo y si bebes más, mejor.
Lo mejor que podemos hacer es mantenernos hidratados y bebiendo agua el día entero.
¿Cómo reconocer la deshidratación?
Los síntomas específicos de deshidratación durante el ejercicio incluyen fatiga, confusión, mareos,disminución del rendimiento y calambres musculares.
Una hidratación adecuada optimiza el rendimiento y la recuperación en el deporte y los ejercicios. Nuestros cuerpos están mayormente compuestos de agua y debemos darle a nuestro cuerpo agua diariamente para absorber los nutrientes. Además lubrica nuestras articulaciones, elimina toxinas, facilita el riego sanguíneo y nos ayuda a mejorar las funciones digestivas.
Asique ya sabes, ¡a hidratarse!